Los pasados días 12,13 y 14 de octubre, miembros de nuestra Juventud, asistieron al II Encuentro Carmelo Joven Ibérico, teniendo lugar dicho acto en la ciudad de Marco de Canaveses (Portugal).
Desde muy temprano, se puso rumbo hacia el Convento de Avessadas, realizando dicho viaje con la juvenud del colegio Virgen del Carmen de San Fernando (Cádiz).
Tras 12 horas de viaje, llegamos al destino, donde ya se encontraban grupos de otros puntos geográficos de España como Madrid, Valencia, Castellón, Salamanca, Segovia y Granada y también de Portugal como Braga, Oporto y Fátima.
Primeramente, tuvo lugar la presentación en la Ilgesia de los distintos grupos, precedido de vídeos del anterior encuentro celebrado en Ávila.
Tras la presentación, llegó la cena y los primeros contactos con el enorme Convento y las cientos de personas que nos encontrábamos.
Para terminar el día, en cuanto a actos, se realizó una Vigilia Musical, acompañado de una gran meditación mediante frases de San Juan de la Cruz: "Qué bien sé yo la fonte que mane y corre,
aunque es de noche".
aunque es de noche".
Así, acababa un día agotador, no sin antes, un poco de cánticos, donde no faltaron nuestras sevillanas.
Llegó el segundo día, comenzando tal, con una misa a las 08:00h., que abría la jornada más cargada en cuanto actividades.
Tras la misa, disfrutamos del desayuno, un rato de tiempo libre para relacionarnos con todos los grupos, una Conferencia sobre San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús, a cargo del Provincial de la Orden de Portugal, P. Joaquím Da Silva Teixeira, talleres en grupo, comida, tiempo libre, paseo por la montaña, paseo orante, merienda, tiempo libre, cena y por último un concierto de música portuguesa, donde actuaron diferentes grupos.
De esta forma, acababa una jornada espléndida de convivencia, relexiones, aprendizajes, vistas de nuevos espacios rurales y muy buenos momentos jóvenes.
Llegó el domingo, y con el, la clausura del II Encuentro Carmelo Joven Ibérico. A las 07:30h, daba comienzo la misa, presidida por el Provincial de Portugal. Tras finalizar, muchos grupos pusieron rumbo a sus ciudades y otros disfrutamos del último desayuno en familia. Al terminar, comenzó el viaje de vuelta, con el gran recuerdo de los días que habíamos disfrutado en Marco de Canaveses.
En conclusión, un encuentro magnífico, donde pudimos disfrutar de muchísimos momentos, actividades, personas, paisajes... en definitiva una nueva experiencia de nuestra vida de hermandad, pues todos eramos diferentes, pero teníamos una cosa en común, la Fé cristiana.
Fotos: Samuel de la Cruz Martínez.
